5 Pasos para Responderle a un Prepotente o Fanfarrón

Responderle a un prepotente

Cόmo responderle a un Prepotente o Fanfarrón

Soy un seguidor del psiquiatra y autor Mark Goulston.

El escribió un artículo en “Psicology Today” como una
muestra de lo que encontrarás en su nuevo libro:
Talking to Crazy

Desafortunadamente está en inglés, tanto el libro como
el artículo.

Me gustó tanto el artículo que lo compartí con familiares
y amigos que conocen el idioma.

A mi compadre Rafael, le encantó tanto que me preguntó
si el libro estaba en español y la respuesta es no.

Entonces, se me ocurrió compartir las partes más
importantes de ese artículo, en español con algunos
aportes propios.

El Fanfarrón o Prepotente.

Es importante tener en cuenta lo siguiente:

¿Qué es un fanfarrón o cómo ser uno de ellos?

Se define como fanfarrón a una persona que se la echa de mucho, que se cree una maravilla sin serlo, porque los resultados lo desmienten.

Si tú buscas esa palabra en un diccionario podrás leer que fanfarrón es una persona que se jacta de lo que es y no lo es, que se lo echa de valiente, de bravo y busca pleitos.

Nunca esperes que esas personas cambien su manera
de actuar cuando:

• no les gusta algo,
• no quieren hacer algo,
• cuando te quieren obligar a que estés de acuerdo
con ellos o
• cuando ellos te quieren obligar a que hagas algo.

Esto es muy importante que lo consideres para que no
te sorprenda ese tipo de comportamiento.

¿Qué hacer ante un fanfarrón?

Los pasos son los siguientes:

1. Mantener la serenidad.

2. Después que la persona termine de gritar o exponer
con voz fuerte, mírale a los ojos.

No desvíes la mirada. No mires hacia abajo o lejos, mírale
directamente a sus ojos y espera 4-5 segundos antes de
responderle (Cuenta en tu mente hasta cinco). Esto le
indicará a la otra persona que no pudo intimidarte.

3. Responde con un Hmmmm y espera a que la otra
persona te responda. Esto le va a indicar a él o a ella
que su conducta no funcionó esta vez.

4. Espera que aumente su reacción, es decir, subirá más
su volumen de voz, tal vez te insulte o te diga qué quieres
decir con hmmmm.

Todas estas reacciones indican que se está poniendo
nervioso (a) porque su táctica no está funcionando, que su
manipulación no está trabajando.

Opciones de Respuestas.

5. Ahora tienes 4 opciones para continuar
respondiéndole:

Puedes escoger la que se adapte mejor con tu manera
de ser y con la situación y el ambiente en que te encuentres.

Opción I. “¿Realmente crees lo que acabas de decir?”

Mantén la calma y espera que aumente su voz o diga alguna
palabra hiriente.

Con serenidad, le dices, dime cómo fue que llegaste a
creer eso, por qué lo crees y aún más importante, cómo lo
que estas proponiendo es realizable.

Opción II. “¿Por favor, podrías repetir lo que estás
diciendo en un tono de voz normal porque ese tono
de voz alta me distrae de escucharte y de considerar
lo que estás diciendo?

De nuevo, si exagera su extravagante conducta o te insulta,
responde con calma:

« Yo no soy tan inteligente como tú;
pero si lo que tú dices es tan importante para ti el decirlo,
entonces, es también importante que lo digas de una manera
en que pueda escucharlo. ¿Estás de acuerdo? Esto es el
porque te estoy pidiendo que lo repitas en un tono de voz 
normal.

Opción III. No hagas caso de lo que te haya dicho, si te
interrumpe y te corta; aún cuando estas a la mitad de una
declaración, haz una nota mental de donde quedaste y
le permites que grite y que termine lo que te está diciendo y
con serenidad le dices: “como te estaba diciendo…»

Esto le demostrará que no te pudo sacar de tus pensamientos
y es un ejemplo de mantener la calma bajo presión.

Opción IV. “Mi mente estaba vagando en el pasado unos
segundos atrás, ¿podrías, por favor, repetir cada cosa
que me dijiste?

Esta opción es la favorita de Mark Goulston porque demuestra,
no sólo que mantienes la elegancia y postura; sino que muestras
tener la presencia de ánimo y la audacia para confrontar a alguien
y mostrarle con hechos que es una persona aburrida, cuando ellos
creen que son cualquier otra cosa menos que son aburrid@s.

Y el autor, continúa: «Disfruta el mirarlos retorcerse»

El afirma que el usó esta estrategia en el juicio que se le
siguió a O.J. Simpson.

Quiero terminar este post con la invitación a que escribas
tu opinión en la sección de comentarios y decirte que en las
referencias está el artículo original en inglés, el libro y
otras obras de Mark Goulston.

Hernán.

Referencias:
https://www.psychologytoday.com/blog/just-listen/201509/trumping-trump-and-winning-the-upper-hand

Para ver el nuevo libro y otras obras de Mark Goulston
clic en: Talking to Crazy

Haz Una Cita.


Publicado

en

por

Etiquetas: